En medio de la esencia religiosa y cultural que caracteriza a la Semana Santa en Antequera, este año la celebración de la Semana de Pasión se ha visto marcada por las inclemencias meteorológicas, situación que ha obligado a la gran mayoría de cofrades antequeranos a quedarse en sus templos, a excepción de dos Cofradías que realizaron su Estación de Penitencia, aunque mermadas en sus respectivos recorridos por la amenaza de lluvia.
Desde el inicio de la semana, los fieles y visitantes aguardaban con expectación el despliegue de las emblemáticas procesiones que anualmente recorren las calles de esta histórica ciudad. Sin embargo, la incertidumbre se apoderó de la atmósfera festiva cuando el Domingo de Ramos se anunció el retraso de la salida procesional debido a condiciones climáticas adversas, y que finalmente tuvo que ser suspendida. La misma tónica siguió el Lunes Santo, cuando la Cofradía de los Estudiantes anunciaba la no salida procesional, así como el Martes Santo en la Cofradía del Rescate. En la Cruz Blanca también intentaron esperar que pasara la lluvia, pero acabaron por anular el cortejo.
El miércoles por la mañana, un atisbo de esperanza inundó las calles antequeranas con el traslado de la imagen del Señor del Mayor Dolor, una procesión cargada de simbolismo y fervor religioso que un año más contó con el acompañamiento del Tercio Gran Capitán 1º de la Legión. Aunque breve, este momento permitió a los devotos rendir tributo a una de las advocaciones más veneradas de la ciudad, que ya por la tarde, tampoco pudo realizar su salida procesional.
El Jueves Santo pudieron salir a la calle las Cofradías de Consuelo y Servitas, viéndose obligados a recortar los recorridos inicialmente previstos para tratar de ganar tiempo ante la amenaza de lluvia, impidiéndose tambien el desarrollo de las tradicionales Vegas.
El Viernes Santo volvió a planear sobre Antequera la sombra de la lluvia, dejando a las Cofradías de Abajo, Socorro y Soledad sin poder salir a las calles de Antequera.
El Domingo de Resurrección se celebró la misa en San Juan de Dios, durante la cual tomaron posesión de sus cargos en el seno de esta Agrupación de Cofradías, el Mayordomo, Sergio Morales, la Cronista, Rocío Moltó y el Consejero, Pablo Guerrero. Ante la amenaza de lluvia, la Junta de la Agrupación acordó no realizar la salida del Santísimo Cristo Resucitado, por lo que el trono se meció dentro del templo, mientras la Agrupación Musical Nuestra Señora de Consolación, de Villanueva de Algaidas, interpretaba marchas procesionales.
A pesar de las limitaciones impuestas por las circunstancias, el fervor religioso y la devoción de los habitantes de Antequera no se vieron mermados. Las iglesias se llenaron de fieles que, con profunda fe, conmemoraron los pasajes de la Pasión de Cristo y reflexionaron sobre el significado espiritual de esta semana sagrada.
En última instancia, la Semana Santa en Antequera del presente año quedará registrada en la memoria colectiva como un período en el que la adversidad desafiaba la tradición, pero donde la esencia de la celebración religiosa prevaleció, fortaleciendo los lazos cofrades y renovando el compromiso con la fe.